El partido que inauguraba la jornada era el más esperado de todos, en la capital de Italia se enfrentaban Roma e Inter. Los locales aún sin Totti titular, aunque ya disputó algunos minutos al final, repitieron alineación con un ataque enrachado formado por Toni y Vucinic, apoyados por Perrotta y Ménez y Pizarro. Por su parte Mourinho volvió a repetir con Eto´o como titular, dejando a Pandev en el banquillo.
El estadio registró un magnífico ambiente durante todo el encuentro y más aún cuando pasado el primer cuarto de hora, Julio César dejó muerto un balón dentro del área pequeña para que el capitán De Rossi estirase la pierna y abriese el marcador. A partir de ahí la verdad que el Inter fue superior en muchos momentos del partido, con varias llegadas peligrosas e incluso un par de disparos a la madera. No sería hasta mediado el segundo tiempo cuando Milito a centro de Sneijder empataba el partido. La jugada venía precedida por un claro fuera de juego de Pandev, que había ingresado en el campo en lugar de Stankovic.
Apenas tardó cinco minutos la Roma en volver a ponerse por delante, algo clave, ya que parecía que el Inter incluso podía remontar el partido. Sin embargo Luca Toni, en una típica jugada suya controló dentro del área y ajustaba el balón con pierna derecha. De ahí al final el Inter tendría alguna ocasión más, como otro disparo a la madera, esa vez de Milito.
También el sábado se disputó el partido que enfrentaba a Palermo y Bolonia, con los locales obligados a ganar para mantener la cuarta posición. Con el joven uruguayo Abel Hernández como titular, Miccoli a su lado, y Pastore algo más retrasado el equipo jugó un gran partido, siendo muy superior en todo momento a su rival.
Ya en el minuto diez Miccoli abría el marcador con un colocado disparo raso. Después Pastore tuvo una clara ocasión para hacer el segundo. Y aunque el Bolonia apenas se acercó a la meta de Sirigu, Adailton, con un libre directo empataba el encuentro, quedaba poco para el descanso, pero el tiempo suficiente para que Miccoli anotase el penalty cometido sobre Hernández. Tras la reanudación la superioridad sería aún mayor, con Hernández creando numerosos problemas a la defensa rival. Miccoli sentenciaría el partido con el gol que significaba el hat-trick del buen delantero italiano que seguramente no acuda al Mundial.
Ya en la jornada de domingo destacamos el partido de la Juventus, que volvió a sufrir para ganar e hizo sufrir a los aficionados con un horrible partido que decidió Melo con un remate en una jugada a balón parado pasado el minuto ochente. Antes de eso, en el primer tiempo Del Piero nos dejó una nueva muestra de su calidad con un gran gol de libre directo. Amoruso, tras un grave error en defensa, que lo dejó solo ante Manninger, hizo el empate. Melo tras ese gol pidió perdón a la afición, a los pocos que entraron al estadio, ya que muchos de ellos se quedaron a las puerta en señal de protesta.
Quién si convence en su juego es el Nápoles, con ese tridente de ataque que aniquiló a la Juventus entre semana en un segundo tiempo memorable. Esta vez tan solo pudieron ganar con un solitario gol de Cannavaro al poco de iniciarse la segunda mitad. Su rival fue el Catania, ya con Maxi, Mascara y Martínez asentados en el once. Quien parece haber perdido protagonismo es el japonés Morimoto, que ha reducido sus minutos sobre el campo de forma considerable.
Con más contundencia ganó la Fiorentina al Udinese, no obstante el encuentro estuvo bastante igualado, al menos en sus primeros 45 minutos, donde ambos conjuntos contaron con ocasiones. De nuevo pudimos ver a un Frey salvador con varias acciones destacadas. Vargas abrió el marcador de falta directa, una jornada para disfrutar con este tipo de disparos. Después Pepe empató el partido al aprovechar el buen pase de Di Natale. Ya en la segunda parte Gilardino, Santana y Jovetic demostraron su pegada y dejan al Udinese en una peligrosa decimoséptima posición.
La Sampdoria, que lucha también por la cuarta posición tenía un complicado encuentro ante el Cagliari, y a pesar de que se adelantó en el marcador con el gol de Guberti, los de Allegri, como acostumbran, no se vinieron abajo y empataron en los minutos final por mediación de Nene, que después sería expulsado. El equipo de Cerdeña suma siete jornadas sin ganar y su sueño de jugar en Europa es ya casi imposible.
Hablamos por último del partido del Milán, que cerró la jornada. De nuevo el equipo rossonero contaba con la oportunidad de acercarse al liderato, sin embargo la volvió a desaprovechar. Sin Pato, sin Ronaldinho, sin Pirlo vimos a un equipo muy gris que aunque se adelantó con el penalty transformado por Borriello en ningún momento fue superior, no fue capaz de atravesar la línea defensiva romana y con esas sensaciones cuesta pensar que pueda ser campeón. Lichteiner empató el partido a la media hora cuando el balón le quedó franco dentro del área con algo de fortuna.
Penalty Fever
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