Premier League: Jornada 28

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Aunque el acontecimiento más importante sucedido este fin de semana en Inglaterra es el triunfo del Manchester United en la final de la Carling Cup ante el Aston Villa, nos centramos en los partidos la jornada número 28 que han igualado aún más la situación tanto en la parte alta como en la baja.

La jornada se abría con ese esperado partido en Stamford Bridge. Ancellotti situó de nuevo a Malouda en el lateral derecho y por lo demás la alineación era la habitual. Por su parte Mancini, que no contaba con el sancionado Adebayor dejó solo en punta a Tévez aunque acompañado desde las bandas por Adam Johnson y Bellamy. Un planteamiento demasiado defensivo que sin embargo le daría resultado.

No obstante, los locales, que fueron muy superiores en los primeros minutos contaron con buenas ocasiones, y no sería hasta el minuto 40 cuando Lampard marcaba tras ajustar el balón al palo. Y cuando el Chelsea seguía en campo rival intentando ampliar la ventaja, un balón largo hacia Tévez, que se encontraba solo ante tres rivales, sirvió para que el argentino se plantara en el área, dejase atrás a la pareja de centrales formada por Terry y Carvalho y con un disparo flojo batiría a Hilario.

Después, nada más comenzar el segundo tiempo, Bellamy, que se marcó unos últimos 45 minutos geniales adelantó a su equipo. Y en esos momentos el partido quedaría muy a favor del City, que aprovecharía la obligación local de atacar para lanzar contragolpes mortíferos. Uno de ellos significaría el penalty de Belletti y la expulsión para el brasileño. Tévez ampliaba la ventaja. Y aún quedaba otro contrataque, iniciado por Tévez, que le cedió el balón a Wrighy Philips y este de nuevo para Bellamy, que marcaba a puerta vacía. Por último, ya en el descuento, Lampard volvía a marcar esta vez de penalty para recortar distancias.

Esta victoria del City benefició completamente a sus vecinos del United, que ya habían ganado su partido ante el West Ham con dos goles de Rooney, ambos de cabeza a pase de Valencia, y otro de Owen.

También beneficiado saldría el Arsenal, que supo resolver un complicado partido en Stoke, sobre todo cuando los locales se adelantaron con un gol de Pugh al rematar un saque de banda de Delap, que volvió a dar la tarde a los de Wenger. Los gunner no se encontraban en el campo y apenas conseguían mantener la posesión del balón, sin embargo en una de las primeras incorporaciones al ataque el balón le llegaba a Bendtner que igualaba el marcador con un remate de cabeza.

En el segundo tiempo llegaría esa jugada que marcaría el resto del encuentro, la bestial entrada de Shawcross a Ramsey, que acabaría con doble fractura de tibia y peroné. El central sería expulsado y la balanza caía del lado de los londinenses, que en lugar de venirse abajo la lesión del compañero sirvió de motivación para conseguir el tanto que les diese los tres puntos. Ese gol llegaría ya casi al final, con un penalty transformado por Fábregas. Y después aún quedaba tiempo para que Vermaelen sumara un gol más en su cuenta y ampliase la renta.

Ya en la jornada de domingo el encuentro más atractivo enfrentaba a Tottenham y Everton. Los locales pusieron la alineación más talentosa de los últimos partidos con los croatas Modric y Kranjcar y con Defou junto a Pavlyuchenko en punta, que ha pasado de no jugar a titular a base de goles. Y solo tardó diez minutos el ruso en batir a Howard al aprovechar una buena acción de Defou, que le dejó el balón en bandeja.

Después Modric antes de la media hora marcaba el segundo con un gran disparo que rozó el larguero antes de colarse en la portería. Los toffies no se enteraban de lo que sucedía en el campo y en esos instantes daba gusto ver jugar al equipo entrenado por Redknapp.

Eso se acabaría tras el descanso, quizá algo tuvieron que ver los cambios, la salida del lesionado Huddlestone por Kaboul en el lado local y la entrada de Osman en el equipo de Moyes, además de la de Donovan minutos más tarde. De esa forma llegaría el gol de Pienaar para recortar distancias y meter el miedo en el norte de Londres. Finalmente la victoria se quedaba en casa a pesar de ese dominio del Everton que se mantuvo toda la segunda parte.

También destacaba el partido de Anfield entre Liverpool y Blackburn. Con Torres ya titular el equipo dio mejores sensacional, más ágil en ataque, con muchos más huecos al conseguir una transición más rápida. Así es como llegarían los dos goles de los reds antes del descanso. El primero de Gerrard y el segundo del delantero español a pase de Maxi para devolver la ventaja que minutos antes había roto Andrews de penalty. Míchel Salgado volvió a ser titular, y es que parece que en esta parte final de temporada se ha hecho con el puesto en el lateral derecho.

Esta vez sí que ganó el Bolton y mucho tuvo que ver la vuelta a la titularidad de Wilshere, que le cambia la cara al equipo, dándole mayor serenidad en el centro del campo y haciendo jugar a sus compañeros. Buen partido se marcó también el coreano Lee, destacando la jugada que se marcó en línea de fondo y que acabó con el gol del central Knight.

Los restantes partidos dejaron la victoria del Birmingham por 1-0 ante el Wigan, que continúa en la cuerda floja, a solo un punto del descenso. Sunderland y Fulham empataron sin goles y por último el Burnley cayó en casa 1-2 con el Portsmouth, que horas antes había sido sancionado con nueve puntos, por lo que prácticamente ya es equipo de la segunda inglesa. Aplazado queda el Hull-Aston Villa